lunes, 19 de julio de 2010

Allá a lo lejos y hace tiempo...

Dos almas...que se buscan, se perciben, se sienten, se necesitan, se compementan a distancia...esperan...almas, que no conocen el paso del tiempo, que pueden prescindir de las palabras, que padecen la furia del instinto...tanta eternidad, tanta esencia, tanta pasion. Ese universo de emociones...atado a un cuerpo...tan mortal, tan absurda y tristemente efimero, esa inutil fraccion de segundo en la eternidad temporal del universo...absurdo, pero el alma necesita un cuerpo para acariciar...Son los cuerpos que las comunican...pero las limitan, las ahogan, las sepultan, las ignoran...porque el cuerpo duda, tiembla...es el cuerpo el que siente el miedo...y otra vez...los pulsos se aceleran...respiraciones contenidas, perfues conocidos, pieles que se traicionan, miradas que penetran la razon, alientos que se mezclan, bocas que se persiguen...parece que es el momento justo, parece que el tiempo se detiene, a punto esta de abrirse paso la eternidad de esas almas dispuestas a fundirse...pero no...una vez mas la duda...y esa inevitable sensacion que deja lo inconcluso, ese olor a final abierto, a opotunidad perdida, a asunto pendiente....que ya es conocido, que siempre es el mismo y se repite sin dar una tregua...Dos almas solitarias, dos almas que nunca fueron dos, porque ya estan unidas, lejos del desencuentro de los cuerpos....pero esperando ese beso que no llega...

martes, 13 de julio de 2010

Una carta de amor


Todo lo que de vos quisiera es tan poco en el fondo porque en el fondo es todo,
como un perro que pasa, una colina,esas cosas de nada, cotidianas,espiga y cabellera y dos terrones,el olor de tu cuerpo,lo que decís de cualquier cosa, conmigo o contra mía,
todo eso es tan poco, yo lo quiero de vos porque te quiero.
Que mires más allá de mí,que me ames con violenta prescindencia del mañana, que el grito de tu entrega se estrelle en la cara de un jefe de oficina,
y que el placer que juntos inventamos sea otro signo de la libertad.

J.C.